En un cambio de domicilio, la mudanza supone un alto nivel de estrés e incluso episodios de ansiedad. Saber que hay que desplazar una cantidad ingente de pertenencias puede hacer perder el control hasta la mente más centrada.
Por ello, desde Mudanzas Itálica os ofrecemos algunos consejos, y en esta ocasión nos centramos en los referidos a embalar muebles para mudanzas.
Vaciar los muebles y desmontarlos
Un primer consejo es vaciar todos los muebles, limpiarlos y desmontarlos. Así conseguimos que ocupen menos espacio en el camión. Una vez almacenados en una caja o en una bolsa, hay que anotar el mueble y el total de piezas.
¿Qué necesitamos para la mudanza?
Los materiales imprescindibles a la hora de embalar muebles para mudanzas son los siguientes: papel de burbuja y plástico film (como elementos de protección), cajas de diferentes tamaños, cinta de embalar, cubresofá y cubrecolchón, mantas protectoras, protectores de esquinas, relleno de espuma para los objetos más frágiles y otros elementos accesorios de protección y almacenamiento.
¿Y las herramientas?
Además de materiales, los utensilios básicos para organizar la mudanza de los muebles son un martillo, destornilladores, llave inglesa, tijeras, cinta métrica y cúter. Todas estas herramientas son útiles para desmontar los muebles, almacenarlos y etiquetarlos y, finalmente, instalarlos en el nuevo domicilio.
¿Cómo se embalan los muebles?
Siempre que sean desmontables y sea funcional hacerlo, habrá que optar por desmontarlos para que ocupen menos espacio en la mudanza. Las mesas, las librerías y los armarios se pueden envolver con telas y mantas que los protejan de golpes.
Las sillas, los sofás y los sillones pueden ir envueltos en papel film, retirando los cojines y las almohadas, y añadiendo algún protector para las esquinas. Todos los textiles pueden ir en bolas de plástico.
Finalmente, los electrodomésticos basta con colocarles protectores en las esquinas, aunque también se pueden embalar con plástico film.
Y sobre todo, antes de todo este trabajo es aconsejable hacer inventario, organizar bien la mudanza y guardar especial atención a los objetos más delicados, como la vajilla, los espejos, los cuadros y los objetos decorativos.